Si gustas de los deportes, en especial del Basquetbol, probablemente hayas escuchado hablar del equipo fenómeno de los últimos años, los Golden State Warriors.
Actualmente se encuentran en las fases finales del campeonato y lamentablemente no han podido contar con su entrenador, el ex jugador, Steve Kerr.
Lo interesante, es que el actual entrenador se ha debido eximir de sus labores (y poniendo en duda su presencia en un futuro) debido a que ha llegado a experimentar dolores tan fuertes de espalda que ha llegado incluso a padecer náuseas y ausentarse de su trabajo.
Lo interesante, de un jugador de la más alta elite deportiva, a sus 51 años dice: “Si tienes problemas de columna, aléjate de la cirugía. Puedo decir esto desde el fondo de mi corazón, rehabilitación rehabilitación, rehabilitación”
Steve Kerr estuvo sometido a una cirugía de columna hace aproximadamente dos años. En donde tuvo una evolución satisfactoria, pero lamentablemente ha vuelto a padecer sintomatología importante y, lamentablemente para su equipo y fans del deporte, ausentarse de su trabajo.
Cuando los quiroprácticos velamos por la salud de nuestros pacientes, incentivamos por la necesidad de agotar todas las instancias conservadoras de tratamiento posible, no sólo con el fin de evitar una cirugía, sino porque la resolución de los problemas lamentablemente no está de la mano con ella.
Las estadísticas muestran en un estudio del año 2013 que el 42,7% de los pacientes que consultaron con un cirujano, al plazo de 3 años terminaron con una cirugía de columna, en comparación al 1,5% de pacientes que consultaron al Quiropráctico.
Lamentablemente, existe un porcentaje de pacientes que la indicación de cirugía es necesaria. Pero actualmente la resolución de los problemas está bastante lejos de solucionarlo con una cirugía de columna. Tanto los ajustes quiroprácticos como el trabajo en conjunto con Kinesiólogos logran que, en el largo plazo, la resolución de este tipo de cuadros sea permanente, permitiendo de esa forma lograr un estado de salud óptimo, acorde a las condiciones del paciente.
No se trata de ser un enemigo de la cirugía, porque claramente existen situaciones que son de indicación necesaria, pero debemos ser cautos al momento de tratarnos y someternos a cirugías, porque no siempre es la mejor solución. Siempre debe ir acompañada de una rehabilitación correcta.
Somos los primeros en decir que los beneficios de la quiropráctica van mucho más allá de la disminución de síntomas, pero es un gran efecto que se produce en el común de nuestros pacientes al momento de remover la interferencia sobre el sistema nervioso.
Existe lamentablemente muchas personas que no conocen estos beneficios. Y llega a ser difícil pensar como una ex jugador y entrenador en la elite deportiva, pudo terminar con una tan mala resolución de su cuadro de columna. Es nuestra labor decirles a nuestros conocidos, amigos y familiares lo importante que es consultar con los especialistas que corresponden, con el fin de resolver completamente estos problemas.